Cuando sus intentos de arreglar su línea temporal fracasan, Barrett acepta colaborar con Miles para intentar encontrar una solución. Pronto se ven explorando los misterios que subyacen en la universidad y viviendo aventuras salvajes y románticas. A medida que empiezan a enamorarse el uno del otro, deben enfrentarse a una pregunta con difícil ¿qué pasará con su relación si finalmente consiguen pasar al mañana?
¡Hola lectores! Hoy les vengo con la reseña de un libro que para mi desgracia me decepciono mucho y no es que esperara que entrara a mis mejores lecturas del año, simplemente quería pasar un buen momento y pues… no fue nada de eso, fue terrible para mí, porque el libro anterior de la autora, me había gustado mucho y pues con este me lleve una decepción.
Barret Bloom, está iniciando la universidad y en cuanto llega a la habitación que le asignaron en la residencia, se da cuenta que por el momento estará sola, pero unas horas después se encuentra con la terrible sorpresa de que su compañera de habitación, será nada más y nada menos que la chica que le hizo la vida imposible en la preparatoria, para ser más específica, en el periódico escolar.
Así que para olvidar ese mal comienzo del día, decide ir a clase, de física, ella todavía no entiende cómo es que termino en esa clase, pues no es para nada lo que ella quiere. Pero como ella es ella y su día va de mal en peor, el chico que se sienta a su lado, la humilla en clase y queda toda avergonzada. Y por si eso no fuera poco, cuando asiste a la entrevista para entrar al periódico, le va terrible tanto que cree que nunca lograra entrar y pues ya para rematar su día espantoso, decide asistir a una fiesta y por cosas que solo le suceden a ella, termina provocando un incendio. Y esto es un día típico en la vida de Barrett.
Lo raro esta que después de ese día tan horrible, cuando regresa a su habitación, se encuentra con la puerta cerrada y decide dormir en la sala común. El detalle esta, que a la mañana siguiente, se despierta en su habitación y vuelve a ser 21 de septiembre, el día de repitió. Pero cuando va a enfrentar a Miles (el chico de la clase de física) se da cuenta que él está en la misma situación que ella, solo que por mucho más tiempo y no sabe cómo salir de ahí. Así que entre los dos tendrán que buscar la forma para poder arreglar ese bucle del tiempo en el que se encuentran.
Si les soy sincera, la sinopsis se leía muy bien e interesante, pero el detalle de este libro no está en la trama o el desarrollo que tiene, sino en su protagonista, Barrett es lo que le sigue de insoportable, es que ella se cree la más chingona del mundo, sarcástica a mas no poder, y no de ese sarcasmo que disfrutas, no, es de ese que quiere lastimar a los demás personajes y cuando dice o hace algo, no le importa a quien se lleve de frente con tal de que ella quede bien. De verdad que es una de las protagonistas más insoportablemente odiosas que he leído. Vamos que no tengo ni idea de cómo hacer esta reseña, sin exponer todo mi odio hacia ella.
Y es que aunque la situación no es nada normal, leer algo tan repetitivo y con ella como narradora, lo hace mil veces peor y si a eso le sumamos que tiene muchas cosas de física, te juro que te quieres arrancar el cabello de lo terrible que puede ser. Pero es que ni el personaje de Miles, puede salvar este libro o contrarrestar un poco a la odiosa personalidad de Barrett.
Aparte de que el libro como habla de cosas de física, por momentos puede resultar aburrido y más si no te gusta esa materia. De romance, ni hablemos porque como ya odiaba a la protagonista, lo único que quería es que se terminara el libro y no lo disfrute, para nada.
En resumen, Nos vemos ayer, es un libro que al menos para mí tenía una muy buena idea, pero los personajes tan terriblemente odiosos, no ayudaron en que pudiera disfrutar de la lectura.
Y eso sería todo por ahora, nos vemos en la siguiente entrada.
Besos.
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